Un violento episodio ocurrió esta semana en el Centro Educacional 4 (CED) de Guará, en el Distrito Federal de Brasil, cuando un profesor de matemática de 53 años fue brutalmente agredido por el padre de una alumna tras haberle llamado la atención en clase por usar su celular.
El ataque, que fue filmado por otros estudiantes, muestra al hombre golpeando al docente en reiteradas ocasiones dentro de la sala de coordinación mientras alumnos intentan detenerlo.
El origen del conflicto: una llamada de atención
El profesor relató que todo comenzó durante una clase de matemáticas, cuando pidió a la joven que dejara de usar su teléfono y copiara el contenido del pizarrón.
Minutos después, la estudiante abandonó el aula y llamó a su padre, quien se presentó en la escuela visiblemente alterado para exigir una explicación.
“Le dije que no tocara su teléfono y que copiara el pizarrón. Debió haber llamado a su padre, y él vino a pedirme una explicación”, declaró el docente a medios locales.
La agresión quedó grabada
El ataque ocurrió en la sala de coordinación, donde el padre —identificado como Thiago Lênin Sousa— tomó al profesor por la ropa y le propinó al menos nueve golpes de puño.
En el video se ve cómo otros docentes y estudiantes intentan intervenir sin éxito. La escena terminó en caos y gritos.
De manera inesperada, la propia hija del agresor intervino: la joven se abalanzó sobre su padre y aplicó una técnica de jiu-jitsu brasileño para inmovilizarlo en el piso, deteniendo la golpiza.
Entre lágrimas, le gritó: “¿Por qué hiciste eso? ¡Es mi profesor!”
El docente terminó con hematomas en el cuerpo y los anteojos rotos, pero no sufrió heridas graves.
El testimonio del profesor: “Solo queda tristeza”
Con 25 años de carrera, el profesor aseguró que nunca había vivido una situación similar. “Por el propio video se ve que ni la hija imaginaba que el padre iba a hacer eso conmigo. Me tomó completamente por sorpresa. Lo único que hice fue protegerme para que no me pegara en la cara”, contó.
El educador, visiblemente afectado, dijo que se alejará temporalmente del aula por no encontrarse en condiciones psicológicas para continuar. “Pasar por una humillación de este tipo es algo increíble. Solo queda tristeza”, lamentó.
La respuesta policial y las consecuencias legales
La Policía Militar del Distrito Federal intervino inmediatamente y trasladó al agresor y al profesor a la comisaría.
Thiago Lênin Sousa fue acusado de lesiones, insultos y desacato, aunque recuperó la libertad tras declarar, alegando que reaccionó así porque su hija le dijo que el docente la había insultado.
Por su parte, la Secretaría de Educación del Distrito Federal (SEEDF) condenó el hecho mediante un comunicado oficial: “Repudiamos cualquier forma de violencia en el ámbito escolar y reafirmamos nuestro compromiso con el diálogo y la promoción de una cultura de paz en las escuelas”.
Un hecho que reaviva el debate sobre la violencia escolar
El caso generó una fuerte indignación en la comunidad educativa brasileña y abrió nuevamente el debate sobre la violencia contra docentes, un fenómeno en aumento en varias regiones del país.
Sindicatos de profesores exigieron mayor seguridad en las escuelas públicas y campañas de concientización para familias y estudiantes sobre el respeto al rol del educador.
